

LA WEB
Es la característica más atractiva de la Red. Incluso hay quien considera que Internet es la Web. No es así. La Web (también conocida como la telaraña mundial) es uno de los múltiples servicios que ofrece Internet. Esto supone que existan auténticos ordenadores servidores de páginas Web, al igual que existen servidores que gestionan el correo electrónico u otros servicios, como ya veremos. O sea, que para acceder a las páginas Web tendremos que usar un navegador (en nuestro caso Internet Explorer o Netscape Navigator, recuerda) y dirigirnos a uno de esos servidores invocándolo por su dirección URL. Eso es lo que hemos hecho en el ejemplo anterior.
Se estima que existen en la actualidad más de 20 millones de páginas Web para visitar, a las que hay que añadir las miles de páginas que se incorporan cada mes.
Dos son las razones evidentes que han hecho de la Web el servicio que más ha contribuido al acercamiento de la Red a un gran número de personas: su sencillez de manejo, basta con saber usar el ratón; y su atractiva presentación. Una página Web puede contener texto, imágenes, sonidos, vídeo y, lo que la hace especialmente potente, enlaces a otras páginas. La Web es un universo de páginas relacionadas y enlazadas entre sí. Como ves, no sólo representa texto sino también documentos multimedia..
